sábado, 4 de junio de 2011

La Dispute

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Desde la poesía altiva que se da a luz sobre el monte,
Aquel aliento divino de la boca y entrañas de los dioses celestes
Amores indestructibles viven en plena unión con el universo,
Mientras los sonetos como truenos caen y los llantos se vuelven torrente.
La vida desciende de las cascadas azules, muriendo los ojos en los recuerdos,
Y así las bellas manos gritan fuerte sobre los paisajes de fuego trascendente.

Poesía divina tejida viene de la cima del mundo verde
Música que de la tierra se desprende incandescente, escuchando los colores,
Como los astros se funden con las raíces nacientes en medio del tiempo imberbe.
Las palabras resisten y se enraman bajo el seno de la vida resiliente,
Corriendo al compás del pulso templado de la luna que amanece.
Las infantes aves su vía melodiosa dibujan abriendo nubes inconcientes.

La memoria en paraje otoñal como la piel de los árboles al despertar
Se hace savia que aferrada escurre cual vida de estos versos,
Inspiración torbellino, inundada de letras estrelladas observando al infinito
Hondo silencio que de origen ominoso cabalga hacia la paz y me estremece,
Construyendo versos que tu nombre llevan por fuente y espíritu,
Dejando en la omisión las piedras oscuras que entorpecieron el camino.

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Lila A.