lunes, 9 de mayo de 2016

冥王せ つな


















*
Estos días son un manojo de llaves,
Te espero con las manos ciñendo la puerta,
-¡Ven, pasa! ¿Te sirvo algo?
Puedes darte cuenta que soy todo lo que ves.
No hay más: sólo tú, tú después de mí,
Y luego yo después de ti.

Nosotros.

Encontré el destino de tus pasos
Merodeando la calle, mis rincones.
Las ventanas brillan
-¡te estaba esperando!
Siéntate cómodo,
Tengo tus palabras aquí.
-¿Te la llevarás hoy?
Tengo besos, trascendentes.
-No, no me importa.
Nos hemos encontrado,
Aquí y ayer. Siempre.
¿Te acompaño?
Yo te quiero mostrar
Que se puede.
-No, no es un problema.

El amor es pura comisura de labios.
El amor es estrellarse contra el muro.

-¿Quieres algo de comer?
Yo tuve hambre. De ti.
Te vi muchísimo tiempo antes,
Buscabas una dirección.
-¿Sentiste eso?
Hay una mariposa golpeando mis pulmones.
-¿Por qué me miras así?, no lo hagas.

Soy el gato que persigue la luna,
La estrella que se resiste a morir,
Y tú el que yace en el pasto, soñando.
Tus ojos negros tienen esta melodía.

Tú.

-No te duermas.
Sin mí no lo hagas.
Moriría durmiendo,
Imaginando que llegas
Una y otra vez.
-¿Debes irte en algún momento?

Yo no, yo me quedo.



Lila. A.

jueves, 3 de diciembre de 2015

Atrás


**
El camino que preciso,
me promete volver al inicio,
por eso esta noche
puedo repatriar cualquier territorio,
para deshilar las horas perdidas,
y remendar con hilo nuevo
los agujeros de plata
que dejé enrevesados
en el tiempo.
Por la garganta vuelan las cadenas y
los cordones que procuran la conciencia.
Hemos dejado una estela febril,
la cual germina en el lomo del mar.
El verbo se hace flujo repentino,
va musitando retrospectivas al oído.
Atrapo sus tormentas en medio del sopor
que provoca su manotazo,
amaino las caricias
substanciales,
Y el destino crepita bajo mis talones.
A veces los confines fenecen,
y la memoria esparce sonidos difuntos
por la arena y sus cristales.
Cuando el origen es el fin,
hundo mis dedos en la tierra
y siento la textura de todos los muertos. 

martes, 17 de noviembre de 2015

Azul Lejano


Una nave irrumpe en la profundidad del mar rojo,
con un centinela en la proa arrimado  a la mujer de palo,
Ella está llorando por los hijos perdidos.
A miles de kilómetros, la barcaza encuentra su cauce
y se derrama por la humedad.
La tripulación oye los gimoteos, pero no baja la guardia,
pues la lluvia arroja credos imberbes y
paisajes crispados:
un firmamento tronado

por el malestar que ha parido la bruma.
Tanto dolor ajeno, que el mar se ha teñido de azul gélido.
Y los peces, las luces, las llamaradas demenciales estallan como artificios,
haciendo a la neblina crepitar.
El horizonte se dirige hacia la procesión universal,
encausando a un barco con hombres oscuros.
Se dirigen hacia la muerte, creyendo saberlo.
Lloran la muerte, creyendo venerarla
.

lunes, 2 de noviembre de 2015

Al Flâneur se le acabó lo Romántico.



Es una historia congénita.
Caminando sobre el mismo pasto
Entre los árboles, camuflándome.
Haciendo de Flâneur por las calles
Escuchando murmullos opacos,
voy absorbiendo los balbuceos,
deglutiendo:
haciendo el bolo alimenticio
de cosas que se le caen a la gente.
La sociedad es como un dibujo,
de esos que se hacen hablando con alguien
que no se quiere escuchar realmente.
En los No lugares se configuran los residuos
de este mojigato hormiguero.
Voy pisando los nidos entonces,
salen cangrejos.
algunos están demasiado gordos
para hablar de justicia.
Los afiches insultan mis genitales,
Manosean mi cuerpo, lapidando
cada movimiento.
Y entre los trenes, y los neumáticos hediondos
uno que otro grito, de esos que nadie quiere oír
me regala una jaqueca mundial.
El olor a carne podrida,
de atracón de degenerado,
se sienten detrás de las lucecillas
que tanto muerto anda fumando,
y a cada bocanada
golpe y borrachera,
se va erigiendo con colores raros
este paisaje asoleado.
Mientras hundo mi puño en la letra
como sacudiéndome para estar conciente,
voy resistiendo a tanto brío atrapado.
No pagué el pasaje.
En realidad no tengo dinero.
Quizás algún día la tinta inunde la urbe.
No esperaré a nadie para ese día.
Por ahora:

Miro la cortina gris y me dan ganas de hablar.

viernes, 30 de octubre de 2015

Éxodo Mariposa



Entre los escombros, el caos natural de mi mente,
me atrinchero solapada
mirando a través de los recodos de esta habitación.
Cuando espero la noche, cualquier noche, aún en medio del día
derramo la carne a los arrobamientos de la esperanza.
Como si flotara en un arrabal de flores de lata,
observo los arreboles que me devuelven el aliento.
La modernidad se llevó la fe, pero yo sigo acá,
con una lamparita de luz violeta.
Tengo enraizada la piel al cemento, los pies con clavos,
pero las manos libres, el pellejo y la conciencia:
-imagino arrancándonos los clavos-
mientras me paso imaginando barcos,
enchapados de letras invertidas y velas perversas,
en los que podría navegar abriendo las aguas.
Te siento.
A veces en la hendidura aparece la luz en línea recta,
proyectándote.
¿Te estremece mi desierto?
Ve como se subvierte mi aparato de moléculas:

Se libera la mariposa.

sábado, 17 de octubre de 2015

Razón

Tengo mi sed puesta en tu pálpito
Aquí el es una categoría
La proyección de mi deseo es infinita
Seré la llama y alguno la fuente.

Pero jamás permaneceré.